viernes, 30 de mayo de 2014

COMENTARIO DE TEXTOS PERIODÍSTICOS

COMENTARIO TEXTOS PERIODÍSTICO
1.       Aspectos generales
1.a.    Introducción:
-          Señalar tipo de texto y el género. El tipo de texto será el periodístico, dedicado a difundir mensajes que relatan, explidan o valoran hechos reales, novedosos y de interés social a través de los medios de comunicación. Sus principales características son la inmediatez y actualidad, la universalidad y su sujeción a los intereses comerciales, estando por tanto expuestos a la manipulación.
-          Los géneros periodísticos son:
o        a) informativos:
§         noticia: narración objetiva de hechos
§         reportaje: noticia ampliada, con información completa y bien fundamentada.
§         entrevista: reproducción de una conversación entre periodista y personaje relevante.
o        b) de opinión:
§         editorial: postura del periódico ante un hecho de actualidad. Sin firma. Responsable del contenido: el director.
§         artículo de opinión: valoración personal de un hecho de actualidad. Firmado. Responsable: el firmante.
§         columna: artículo de opinión con periodicidad y mayor brevedad. Autor de prestigio.
§         cartas al director: inversión del proceso comunicativo, el lector se convierte en emisor.
o        c) híbridos:
§         crónica: texto informativo amplio que combina rasgos de la noticia y el reportaje con una valoración personal. Siempre van firmadas.
§         crítica: información y valoración de un especialista sobre un hecho de carácter cultural (libros, películas, teatro...)
-          Tema
-          Relación con la época a que pertenece (normalmente, con la actualidad).
1.b.    Desde el punto de vista pragmático:    Varía según el género periodístico. El emisor puede ser colectivo, conformado por la empresa propietaria del medio, o individual, como en los géneros de opinión como el artículo o la columna. El receptor es un público amplio, indeterminado, aunque algunos medios suelen dirigirse a un grupo con una serie de rasgos ideológicos, o de edad. La comunicación es unidireccional, sin posibilidad de respuesta. El código es verbal, aunque se complementa a veces con códigos no verbales, como los icónicos o paralingüísticos (tipología, maquetación).
-          En cuanto a las funciones del lenguaje, dependerán del género. En los géneros informativos estará presente sobre todo la función referencial, y en ocasiones la conativa, a pesar de que se presupone la objetividad. En los de opinión, la conativa tendrá gran importancia, junto con la expresiva. En artículos y columnas puede estar presente también la poética.
2.       Modalidad del discurso: Predomina la narración en los géneros informativos (la noticia es un relato de hechos reales). En el reportaje, la narración suele complementarse con fragmentos expositivos; la entrevista será un diálogo. Los géneros de opinión, por su parte, son eminentemente argumentativos.  
2.a.    La estructura puede ser muy variada. La noticia suele ajustarse a una estructura más rígida: titulares, compuestos a veces por antetítulos y subtítulos; entrada, con la presencia de las seis w; cuerpo de la noticia, en forma de pirámide invertida, de narración cronológica o, en otros casos, mixta. En los géneros de opinión,  al ser textos de modalidad argumentativa, siguen la estructura inductiva o deductiva.
3.       Aspectos morfosintácticos: De nuevo dependerá mucho del género de que se trate.
3.a.    En los géneros informativos encontraremos:
Ø       Predominio de la modalidad enunciativa, debido al afán de claridad.
Ø       Adjetivación eminentemente especificativa, en busca de la objetividad.
Ø       Verbos de acción, dado su carácter narrativo, en tercera persona, en indicativo, y con abundancia de pretéritos o presentes históricos.
Ø       Uso de estilo directo para citar a los protagonistas de la información, a veces mezclado de forma libre con el indirecto, por las limitaciones de espacio: “La diputada adelantó que habrá movilizaciones en contra del ruido, “muy superior al máximo recomendado por la OMS.”
Ø       Predominio de la coordinación y la yuxtaposición sobre la subordinación, que a veces conduce al alargamiento excesivo de las oraciones, con sintagmas nominales interminables, llenos de incisos.
Ø       En el caso de los titulares de las noticias se emplean procedimientos para acortar y condensar la información:
·         nominalización (doblete del ciclismo español)
·         supresión del verbo dicendi (Olano: es un día entrañable)
·         supresión de artículos y elementos relacionantes (Juez español solicita extradición)
·         uso de recursos retóricos para llamar la atención (Francia llora...; España se viste el maillot)
Ø       Tendencia al descuido gramatical, debido a la urgencia de la redacción, o a la comodidad, que lleva a las expresiones tópicas, aunque sean incorrectas, como:
·         uso de transitivos como intransitivos, o al revés (cesó al entrenador)
·         subjuntivo con valor de pret. plusc. (se mantuvo la fuerte bajada que se produjera al inicio de la sesión)
·         condicional de rumor (el gobierno habría iniciado ya los trámites...)
·         gerundio como adyacente de un sustantivo inanimado (un nuevo informe analizando las causas)
·         infinitivo de verbo dicendi como núcleo de una oración independiente (por último, señalar que...)
·         incoherencia en tiempos y modos verbales (solicitó al tribunal que conceda...)
·         pasivas incorrectas, con el CI en sujeto paciente, por calco del inglés (el atracador fue disparado por la policía)
·         uso incorrecto de preposiciones y locuciones preposicionales (los locales ganaban de diez puntos; en base a las buenas perspectiva; a nivel de consumo...)
·         giros prepositivos innecesarios (de cara a)
3.b.    En los géneros de opinión encontraremos:
Ø       adjetivos explicativos
Ø       verbos de pensamiento, lengua..., mayor uso de la primera persona y tiempos verbales variados, con predominio del presente. En ocasiones, presente gnómico (sentencias)
Ø       predominio de la subordinación
4.       Aspectos léxicosemánticos:
4.a.    En los géneros de información:
Ø       impropiedades léxicas y semánticas (problemática, como sustantivo; accesible y asequible, climatología, por clima.)
Ø       derivaciones innecesarias (concretizar, confusionismo)
Ø       pseudocultismos (coyuntura, especular, decantarse por...)
Ø       voces extranjeras (full time, affaire, sponsor) o calcos semánticos (agresivo, doméstico)
4.b.    En los géneros de opinión:
Ø       léxico valorativo
Ø       uso de la connotación
Ø       recursos expresivos y retóricos
Ø       vocabulario más tendente a la abstracción
5.       Procedimientos de cohesión : presencia de recursos de repetición, sustitución, elipsis y marcadores textuales. Los marcadores más frecuentes, en los géneros de opinión son los que marcan la actitud del hablante y su punto de vista (probablemente, en realidad) y los organizadores textuales (por cierto, en conclusión). En los géneros informativos serán los organizadores temporales (luego, más adelante...).
TEXTO MODELO: PERIODÍSTICO.
Memoria y Holocausto
            Cuando los más importantes líderes europeos se reúnan hoy en Oswiecim (localidad polaca a la que los alemanes llaman Auschwitz), para conmemorar el 60º aniversario de la liberación del campo de exterminio allí erigido por los nazis para aniquilar a judíos y a otros "pueblos inferiores", Europa y Occidente en general celebrarán un año más su acto de atrición. Pero hay que tratar de evitar que el mundo se considere en paz simplemente por el hecho de recordar el asesinato de más de seis millones de seres humanos, en lugar de combatir hasta la extenuación las causas que hicieron posible aquella y otras insanias colectivas.

Porque a la postre, y en contra de la aurora prometida tras la Segunda Guerra Mundial, los genocidios masivos se han seguido sucediendo ante la parálisis o lentitud de la comunidad internacional. Están cercanos los ejemplos lacerantes de Camboya, Ruanda, la antigua Yugoslavia o, ahora mismo, Sudán. Todo este horror acumulado nos recuerda que el fogonazo histórico de aquel exterminio masivo mantiene sus epígonos en un mundo que también se dice civilizado y que se considera a sí mismo en buena medida liberado del estigma de barbarie de los autores del Holocausto.

Asumiendo que la bestia continúa agazapada entre nosotros, la Asamblea General de la ONU acaba de conmemorar por primera vez el aniversario de Auschwitz con un homenaje a las víctimas de la solución final. Por su universalidad es el más significativo, pero sólo uno del rosario de actos que van a evocar hoy el inmenso horror perpetrado en el corazón de Europa.

Tal día como hoy de 1944, seis mil personas eran asesinadas en las cámaras de gas y hornos crematorios de Birkenau, uno de los campos de Auschwitz. Un horror que 60 años después aún alienta en países desarrollados en forma de movimientos filonazis.

España, por razones básicamente históricas y demográficas -el franquismo, la no beligerancia en la Segunda Guerra Mundial y la poca población judía en nuestro país-, ha vivido relativamente al margen de este hecho crucial, con las notables excepciones del trabajo de algunos de nuestros diplomáticos. Por eso cabe felicitarse de que se sume a la iniciativa educativa de la UE instaurando el Día de la Memoria del Holocausto, con el propósito, sobre todo, de que las generaciones más jóvenes tengan la oportunidad de conocer y reflexionar sobre una de las páginas más tenebrosas de la humanidad. El minuto de silencio previsto hoy en los centros escolares debería trasladar a los adultos del futuro el estruendo de que el genocidio nazi, cualquier genocidio, es incompatible con la dignidad humana.
El país, 27-1-2005

Estamos ante un texto periodístico, escrito el 27 de enero, el mismo día en que se celebra el evento político sobre el que trata. Suponemos que se trata de un editorial: pertenece al género de opinión, no va firmado y refleja la ideología del periódico, en este caso de El País. Trata un tema de actualidad que puede interesar a muchos lectores interesados y preocupados por los derechos humanos: los líderes europeos se reúnen para celebrar el 60º aniversario de la liberación de Auschwitz, acto que supone recordar a las víctimas del Holocausto y que debería significar una advertencia para que en el futuro no se cometan atrocidades como ésta.
Desde un punto de vista pragmático, el emisor es colectivo, al tratarse de un editorial, el receptor indeterminado, al ir dirigido al público en general y la comunicación unidireccional.
Las funciones de la lengua que predominan son la referencial y la expresiva. No hay referencia en ningún momento a la primera persona, pero hay que tener en cuenta que el editorialista nos da su opinión y nos invita como lectores a la reflexión de las ideas que expone. El condicional de la última oración “debería trasladar a los adultos...” trasluce su opinión y su implicación en el texto. Lo mismo sucede con la oración impersonal “hay que tratar de evitar que el mundo se considere en paz...”. También destacaríamos la función apelativa en el título, dado que intenta captar la atención del lector para que lea el texto.

Adopta la modalidad  narrativo-argumentativa y en el que se valora e interpreta lo que suponen estos homenajes y lo que debieran suponer en el propio presente y en el futuro.
En cuanto a la estructura del texto, podríamos dividirlo así:
  1. Introducción del evento que origina el editorial (líneas 1-4): “Cuando los más importantes.... atrición.” La reunión de los líderes europeos en Auschwitz para celebrar el sexagésimo aniversario de la liberación del campo de exterminio y hacer pública su atrición por no haber actuado con mayor diligencia para evitar el genocidio.
  2. Tesis o reflexión sobre el acto (líneas 4-26): hasta “ una de las páginas más tenebrosas de la humanidad.” en el último párrafo. No basta con recordar la tragedia, hay que actuar para combatir las causas que han hecho posible éste y otros genocidios.
Los argumentos que utiliza para defender su tesis, es decir, la necesidad de combatir las causas, son:
—tras la Segunda Guerra Mundial han continuado los holocaustos, como en Camboya, en Ruanda, en la antigua Yugoslavia y en Sudán.
—los epígonos de este horror se mantienen en el mundo.
—la propia autoridad lo ha reconocido: la ONU, al considerar que el problema sigue vigente, se ha unido a la conmemoración de la liberación de Auschwitz, con un homenaje a las víctimas del Holocausto. En el mismo día, otros muchos actos en el mundo evocan el genocidio perpetrado por los nazis.
—sesenta años después sigue habiendo movimientos filonazis.
—también España se ha unido a la iniciativa europea de celebrar el Día de la Memoria del Holocausto, a pesar de no haber sufrido las consecuencias del nazismo directamente.
  1. Conclusión final de la tesis (líneas 26-28): los adultos del futuro deben asumir que cualquier genocidio es incompatible con la dignidad humana.
En cuanto a la sintaxis, predomina el periodo oracional largo y la subordinación. Encontramos numerosos ejemplos de oraciones subordinadas sustantivas (hay que tratar de evitar que el mundo se considere en paz…, asumiendo que la bestia continúa agazapada entre nosotros…). También hay numerosos ejemplos de oraciones adjetivas en función de CN (localidad polaca a la que los alemanes llaman…, en un mundo que también se dice civilizado. También aparecen ejemplos de oraciones subordinadas adverbiales de tiempo, como la que abre el texto, y de oraciones coordinadas copulativas y adversativas.
Los tiempos verbales que predominan en el texto son: del modo indicativo, fundamentalmente el presente (hay que tratar, están, recuerda, mantiene, se considera, se dice, continúa…), aunque también hay ejemplos de pretérito perfecto simple (se han seguido sucediendo, ha vivido),futuro simple (celebrarán), pretérito imperfecto (eran) y pretérito indefinido (hicieron). El presente de subjuntivo es muy utilizado debido al tipo de oraciones subordinadas que predominan en el texto (se reúnan, se considere, se sume, tengan). Hay que destacar también el uso de perífrasis verbales: durativas (se han seguido sudeciendo), terminativas (acaba de conmemorar), incoativas (van a evocar) y obligativas (hay que tratar de evitar y debería trasladar a los adultos del futuro, que traducen claramente la postura del autor o autores del editorial).
Por lo que respecta a los aspectos léxicosemánticos, conviene atender en primer lugar al título que es breve, pero claro, connotativo e identificativo: dos sustantivos unidos mediante la conjunción copulativa “y”. La palabra “memoria” evoca el recuerdo de algo pasado, supone un monumento levantado en conmemoración de las víctimas que sucumbieron, pero al mismo tiempo es un aviso, una advertencia para evitar que se repitan hechos similares en el futuro. “Holocausto” es una palabra que todos asociamos con genocidio, aniquilación, nazismo. El título resume el contenido del texto, llama la atención del lector y le orienta sobre lo que va a encontrar en él.
Aparentemente es un texto objetivo, ya que en la narración se utiliza la tercera persona verbal (se reunan, celebrarán, se han seguido sucediendo…) y la pasiva refleja, lo que da sensación de imparcialidad y distanciamiento objetivo de los hechos; pero cualquier artículo de opinión, y más un editorial, tiene como finalidad formar o reforzar una opinión, la de la línea ideológica del periódico. Predominio, por tanto, de la subjetividad, a pesar de la pretendida objetividad.
Tono serio, contundente, sentencioso, como lo requiere el tema tratado. El registro lingüístico utilizado es culto, de ahí la inserción de vocablos y expresiones como “erigir” “extenuación”, “insania”, “lacerante” “perpetrar”.... propio de un lenguaje cuidado, aunque no dirigido a eruditos.
Estilo sobrio y preciso, pero se insertan imágenes plásticas que hacen más “literario” el texto: “aurora prometida” (un mundo en paz, metáfora), “bestia agazapada” (la crueldad humana, metáfora), “rosario de actos” (gran número de ceremonias en recuerdo de las víctimas)...
En cuanto a los marcadores discursivos que relacionan los enunciados de un texto y le dan cohesión, y que son muy utilizados en este tipo de textos expositivo-argumentativos, encontramos: contraargumentativos (pero) y causales (porque).





COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS

COMENTARIO TEXTOS LITERARIOS

1.       Parte común
1.a.    Introducción:
-          Señalar tipo de texto
-          Tema
-          Estructura
-          Relación con la época y el movimiento literario a que pertenece
1.b.    Desde el punto de vista pragmático:
-          Ficcionalidad: el autor (emisor real del texto) no se compromete con la veracidad de lo narrado, al margen de que pueda ser verosímil.
1.c.    Dominio de la función poética: mensaje llama la atención sobre sí mismo. Lo anterior se observa en el uso de recursos estilísticos (citar del texto):
-          Si éstos abundan, hablaremos de una fuerte preocupación estética y una importante carga retórica.
-          Si escasean, de realismo o sencillez expresiva.


2.       Parte específica  Texto poético
2.a.    Definición: peculiar disposición de los elementos lingüísticos, que dotan al lenguaje de ritmo, lo cual a su vez implica una especial expresividad de que carece la prosa.
2.b.    Análisis del ritmo (=  métrico): Este ritmo se consigue mediante la repetición periódica de ciertos elementos:
2.b.1.  Métrica: Depende de la medida (número de sílabas) de los versos. En líneas generales, los versos largos producen un tono conversacional y un ritmo lento y reflexivo, mientras que los versos cortos (arte menor) producen una fuerte sonoridad y un ritmo apasionado. Por lo demás, hay tres opciones en cuanto a la medida de los versos en un poema:
o        Regularidad (isometría) à Produce un ritmo marcado y una fuerte musicalidad. Señalar la medida de los versos. Si son endecasílabos, señalar el tipo (heroico, melódico, sáfico).
o         Combinaciones de versos: frecuentemente 7, 11 y 14. En estos casos, suele ser la regularidad de la disposición acentual (en 6ª sílaba, por ejemplo) lo que origina un ritmo poco marcado y suave
o        Irregularidad (anisometría) à Señalar el verso mayor, el menor y el dominante.
2.b.2.  Pausas:
2.b.2.a.  Pausa estrófica:
- Señalar el número de estrofas del poema.
- Señalar el nombre de estas estrofas, si existiera.
- Señalar la regularidad / irregularidad de las estrofas, atendiendo al número de versos por estrofa.
2.b.2.b.  Encabalgamientos (señalarlos):
- Si no existen: ritmo fluido y serenidad expresiva.
- Si existen en todo el poema o en cierta parte del mismo: ritmo trabado y violencia expresiva.
2.b.2.c.  Pausa interna (cesura)
o        Existe siempre cesura en versos de 12 ó más sílabas. Hemistiquios regulares / irregulares.
o        No existe cesura en versos de 11 ó menos sílabas
2.b.3. Rima:
-          Asonante: fluidez expresiva y vaga sonoridad
-          Consonante: otorga gran sonoridad.
-          Inexistente: gran libertad expresiva y tono conversacional. Diversas posibilidades:
o        Verso libre o versículo (anisometría sin rima) En estos casos, el ritmo se consigue:
§         Repetición de palabras
§         Repetición esquemas sintácticos (paralelismo)
§         Anáforas, encadenamientos, sinonimia, etc.
§         Encabalgamientos
o        Verso blanco (isometría sin rima)
o        Verso suelto (en un poema con rima, los versos que no riman)

TEXTO MODELO  POÉTICOParte

2. Parte específica: texto poético


Blas de otero: Digo vivir. 
Porque vivir se ha puesto al rojo vivo.
(Siempre la sangre, oh Dios, fue colorada.)
Digo vivir, vivir como si nada
hubiese de quedar de lo que escribo.

Porque escribir es viento fugitivo,
y publicar, columna arrinconada.
Digo vivir, vivir a pulso, airada-
mente morir, citar desde el estribo.

Vuelvo a la vida con mi muerte al hombro,
abominando cuanto he escrito: escombro
del hombre aquel que fui cuando callaba.

Ahora vuelvo a mi ser, torno a mi obra
más inmortal: aquella fiesta brava
del vivir y el morir. Lo demás sobra.

Nos hallamos ante un texto literario de carácter poético, que trata el tema de las relaciones vida – literatura.
Estructuralmente, distinguimos dos partes en el texto. En una primera parte (los dos cuartetos iniciales) las subordinadas causales que introducen cada estrofa explican los motivos por los que el autor decide rechazar, ya en los dos tercetos finales, la escritura (“abominando cuanto he escrito”) en favor de la vida (“fiesta brava / del vivir y el morir”).
El tema del poema se  relaciona con una preocupación típica de la generación de la posguerra, la del compromiso del escritor con la sociedad. Este realismo existencial dará paso enseguida al realismo social de la década de los cincuenta.
Desde el punto de vista pragmático, el texto es literario porque es ficcional; esto es, el autor (emisor real) no se compromete con la veracidad de lo expuesto, al margen de que pueda ser verosímil.
Desde una perspectiva formal, el carácter literario del texto se manifiesta en el uso de un lenguaje especialmente cuidado y bello, que podemos caracterizar de extrañado o desautomatizado, puesto que no interesa tanto por su valor comunicativo como estético.
Esto, a su vez, remite al dominio de la función poética, por la cual el mensaje llama la atención sobre sí mismo debido a su peculiar belleza y originalidad. Todo ello queda de manifiesto al constatar el empleo de diversos recursos expresivos. Entre éstos, destacamos la abundancia de metáforas (“escribir es viento fugitivo”, “aquella fiesta brava / del vivir y el morir...”, “escombro  / aquel del hombre que fui”), anáforas (estrofas 1 y 2), encadenamientos (verso 3), etc. De hecho, esta abundancia de figuras literarias nos permite hablar, en el texto, de una fuerte preocupación estética y una gran carga retórica.
En cuanto al modo de la enunciación, el texto es poético, debido a la peculiar disposición de los elementos lingüísticos, que dotan al lenguaje de ritmo y, por tanto, de una peculiar expresividad de que carece la prosa. Este ritmo se consigue en el presente fragmento de diversos modos.
En primer lugar, destaca la isometría del poema, ya que todos los versos son endecasílabos, con claro dominio de los sáficos (versos 1, 2, 3, 5, 6, 7, 8, 9, etc.) La regularidad métrica, y especialmente este dominio de endecasílabos sáficos produce en el texto un ritmo marcado y una fuerte musicalidad, y su repetición sistemática aporta una gran vehemencia expresiva al texto.
Destaca también la división estrófica regular del texto, compuesto por dos cuartetos y dos tercetos (se trata de un soneto). En cuanto a los encabalgamientos, existen varios de tipo abrupto (versos 3 y 4, 10 y 11), e incluso uno de ellos llega a dividir una palabra entre dos versos (“airada / mente”), lo cual otorga al poema un ritmo trabado y cierta violencia expresiva.
La rima es consonante, como corresponde a un soneto, y sigue el esquema regular propio de esta estrofa, aunque con una peculiar disposición de los tercetos (ABBA ABBA CCD EDE).

3.       Parte específica: Texto narrativo
3.a.    Definición: relato de unos hechos en su acontecer temporal, por parte de una voz narrativa.
3.b.    Elementos a destacar:
3.b.1.  El narrador: Señalar, citando el texto, si es:
- Primera persona: indicar si es testigo o protagonista y justificarlo. Favorece el acercamiento subjetivo y la cercanía al material narrativo, si bien limita el perspectivismo.
- Tercera persona: Indicar si es omnisciente u objetivo y justificarlo. Implica una mayor lejanía con respecto a lo narrado, pero permite una visión más amplia y la aparición de diversas perspectivas
3.b.2.  Los personajes: Indicar cuántos son y valorar:
o        Su importancia: protagonista y secundarios, y justificarlo.
o        Su tipo:
§         Redondo: justificarlo, señalando en qué consiste su evolución.
§         Plano: justificarlo.
o        Su tratamiento:
§         Distanciado: El narrador no se compromete con la suerte de los personajes. Aparecen la ironía y el humor negro.
§         Comprometido: El narrador se implica emocional o ideológicamente, e interviene juzgando a sus personajes. Ayuda a mover los sentimientos del receptor en una dirección determinada.
3.b.3.  El tiempo: Indicar:
o        Presente, pasado o futuro, y tiempo verbal dominante.
o        Orden temporal de la narración: Señalar si es:
§         Lineal: justificarlo.
§         No lineal: justificarlo, indicando si existe:
·         Prospección: indicando qué sucesos futuros se anticipan:
·         Retrospección: indicando qué sucesos del pasado se relatan una vez han acontecido
o        Duración de la acción: Indicar:
§         Dónde hay aceleración y justificarlo.
§         Dónde hay ralentización y justificarlo.
3.b.4.  Otros aspectos: señalarlos sólo si existen:
3.b.4.a.   Pasajes dialogados: Indicar cómo es la transición entre la narración y el diálogo:
§         Estilo directo (y localizar en el texto) Favorece la objetividad
§         Estilo indirecto (y localizar en el texto) Favorece la subjetividad y la fluidez narrativa
§         Estilo indirecto libre (y localizar en el texto) Favorece la fluidez narrativa
3.b.4.b.  Pasajes descriptivos (objetivos / subjetivos): localizar en el texto y notar la abundancia de adjetivos,  adyacentes nominales y recursos retóricos asociados (metáfora, símil, contraste, etc.) Indicar si se trata de una descripción detallada y minuciosa, o subjetiva, o impresionista (a grandes pinceladas

TEXTO MODELO: NARRATIVA
Eran las doce, pero el general Rodrigo de Aguilar no llegaba, alguien trató de levantarse, por favor, dijo él, lo petrificó con la mirada mortal de que nadie se mueva, nadie respire, nadie viva sin mi permiso hasta que terminaron de sonar las doce, y entonces se abrieron las cortinas y entró el egregio general de división Rodrigo de Aguilar en bandeja de plata puesto cuan largo fue sobre una guarnición de coliflores y laureles, macerado en especias, dorado al horno, aderezado con el uniforme de cinco almendras de oro de las ocasiones solemnes y las presillas del valor sin límites en la manga del medio brazo, catorce libras de medallas en el pecho y una ramita de perejil en la boca, listo para ser servido en banquete de compañeros por los destazadores oficiales ante la petrificación de horror de los invitados que presenciamos sin respirar la exquisita ceremonia del descuartizamiento y el reparto, y cuando hubo en cada plato una ración igual de ministro de la defensa con relleno de piñones y hierbas de olor, él dio la orden de empezar, buen provecho señores.
G. García Márquez: El otoño del patriarca.

Nos encontramos ante un texto literario de carácter narrativo cuyo tema principal es el horror ante la muerte.
Estructuralmente, pueden distinguirse en él dos partes claramente diferenciadas. La primera se centra en torno a la espera expectante de los comensales, y la segunda en el horror al descubrir que se les propone comer a un ser humano.
El texto pertenece al llamado boom narrativo hispanoamericano de los años sesenta, y se relaciona con el movimiento del realismo mágico, como comprobamos en la mezcla de elementos reales con otros inverosímiles, en este caso el racionamiento del ministro de defensa.
Desde el punto de vista pragmático, el texto es literario porque es ficcional, ya que el autor no se compromete con la veracidad de lo narrado, a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, en un texto periodístico o ensayístico.
Desde el punto de vista formal, el carácter literario del fragmento se desprende de un uso del lenguaje especialmente cuidado, que podemos denominar desautomatizado o extrañado, ya que no interesa tanto su valor comunicativo como estético y expresivo. Por ello, podemos decir que domina en el texto la función poética del lenguaje, en virtud de la cual el mensaje llama la atención sobre sí mismo, dada su originalidad, su belleza o su carácter lúdico. Este uso peculiar del lenguaje se observa en el texto principalmente en el empleo de recursos expresivos, como metáforas (“mirada mortal”, “petrificación de horror”), hipérboles (“petrificación de horror”, “nadie respire, nadie viva”), ironías (“egregio general [...] en bandeja de plata”, “una ramita de perejil en la boca”, “buen provecho”, etc.), metonimias (“terminaron de sonar las doce”), y también en la peculiar puntuación y estructura del texto, que desatiende las reglas del uso coloquial de la lengua para favorecer la expresividad del fragmento.
En cuanto al modo de la enunciación, el texto es narrativo, ya que supone el relato de unos hechos en su acontecer temporal por parte de una voz narrativa. Dicha voz narrativa combina el uso de la primera (“presenciamos”) y la tercera persona (“dijo”, “entró”), aunque domina claramente en el texto esta última. En principio, por tanto, nos hallamos ante un narrador testigo en tercera persona, ya que relata unos hechos que ha observado (“invitados que presenciamos...”), aunque participa en ellos sólo de un modo marginal o secundario, lo cual explica la aparición frecuente de la tercera persona. Este narrador testigo sirve, en el relato, para acercar al lector a la sensación de horror de los comensales, ya que él mismo es partícipe de la misma.
Junto al narrador, destacan como personajes el resto de comensales, y son claros protagonistas el General Rodrigo de Aguilar, servido en bandeja, y el responsable de su muerte, al que el narrador sólo denomina con pronombres (“él dio la orden de empezar”) Ambos personajes son planos, pues no modifican su conducta, aunque existe una clara alteración de la misma en el resto de comensales
En cuanto al tiempo de la narración, es claramente lineal, pues los sucesos se relatan en estricto orden cronológico, y sólo cabe destacar cierta ralentización en el avance de la acción, ya que en todo el fragmento sucede en apenas unos segundos, y el narrador se entretiene en la descripción irónica del general servido en bandeja (“el uniforme de cinco almendras de oro de las ocasiones solemnes...”). En los fragmentos descriptivos aparecen, como es lógico, adjetivos (“dorado”, “aderezado”), las subordinadas adjetivas (“puesto...”) y otros complementos del nombre (“con relleno de almendras”).
Por otro lado, es claramente dominante el pasado, más en concreto el pretérito perfecto simple (“trató”, “dijo”, “entró”, “presenciamos”), aunque combinado al inicio de la narración con el pretérito imperfecto (“eran”). Junto a estos tiempos, aparece, cuando el narrador cede la voz a alguno de los personajes, el presente de subjuntivo (“viva”, “respire”).
Finalmente, interesa notar la aparición del diálogo en el texto, puesto que los personajes intervienen directamente, aunque lo hacen a través del estilo indirecto libre (“dio la orden de empezar, buen provecho, señores”), con lo que el relato gana notablemente en ritmo y fluidez. Destaca también un importante pasaje descriptivo, en el que se describe con ironía la aparición del general descuartizado, y en el que dominan claramente los adjetivos y participios (“puesto”, “macerado”, “dorado”), así como otros complementos del sustantivo que son propios de la descripción (“valor sin límites”, “ramita de perejil”, etc.)

4.       Parte específica: Texto teatral
4.a.    Definición: Adopta forma de diálogo, por lo que presenta tres características:
4.a.1.  Intervienen diversos interlocutores [notar número], pero el texto posee, considerado en su conjunto, coherencia y cohesión. Argumentar brevemente.
4.a.2.  Feed-back o intercambio de roles constante entre el emisor y el receptor. Citar voz principal y (si hubiera) voces de apoyo.
4.a.3.  Autosuficiencia: Como diálogo directo, no está subordinado a otras voces narrativas que no sean las propias de los personajes, a diferencia del texto narrativo.
4.b.    Rasgos propios del lenguaje oral:
4.b.1.  Decoro poético (cada personaje habla según su condición social y personal). Argumentar y asociar argumentadamente niveles de uso del lenguaje a cada personaje, si el texto lo permite.
4.b.2.  Uso de fórmulas léxicas coloquiales, propias de la lengua oral.
o        Refranes y frases hechas.
o        Palabras coloquiales o vulgares.
o        Interjecciones
o        Exclamaciones
o        Silencios, elisiones sintácticas, anacolutos e inconclusión de oraciones
o        Interrogaciones directas
4.b.3.  Elementos propios de la función fática.
o        Delimitación verbal del turno de palabra
o        Interrogaciones retóricas
4.b.4.  Elementos propios de la función apelativa o conativa
o        Interrogaciones
o        Exclamaciones
o        Imperativos
o        Oraciones exhortativas
o        Vocativos
4.c.   Elementos propios de la convención teatral
-          Empleo de apartes, para diferenciar los diversos niveles de información que maneja cada personaje
-          Empleo de monólogos, para transmitir al espectador el mundo interior del personaje.
-          Apoyos extraverbales (comentar aspectos de decorado, escenario, gestos, movimientos, etc. que ayuden a la descodificación del texto)
-          Acotaciones: Indicar argumentadamente si son:
o        Literarias (con recursos expresivos y lenguaje connotativo, o de carácter irrepresentable).
o        Funcionales (simples apoyos a la representación).

TEXTO MODELO: TEATRO.
DON LUIS: (Dando una profunda bocanada.) Qué malo es, ¿verdad?
LUIS: Sí, papá. Pero se fuma... Me parece que, te detengan o no, nos esperan malos tiempos, ¿verdad?
DON LUIS: A mí me parece lo mismo, pero hay que apechugar con lo que sea.
LUIS: Hay que ver... Con lo contenta que estaba mamá porque había llegado la paz...
DON LUIS: Pero no ha llegado la paz, Luisito: ha llegado la victoria. He hablado con doña María Luisa. ¿Te acuerdas que alguna vez le llevé un kilo de bacalao?
LUIS: Sí...
DON LUIS: Prometió pagarme el favor. Por mí no puede hacer nada, porque hay que esperar a que me depuren... Pero dice que un amigo suyo a ti podría colocarte.
LUIS: Bueno, y al mismo tiempo estudio.
F. Fernán Gómez: De: Las bicicletas son para el verano.


Nos hallamos ante un texto literario dramático cuyo tema principal es la incertidumbre ante el futuro.
Estructuralmente, el texto presenta una primera parte introductoria, al plantear una conversación que surge de forma espontánea cuando los personajes comparten tabaco de mala calidad, y una segunda parte en la que el padre (Don Luis) plantea a su hijo la necesidad de que trabaje.
El texto se escribe en los años setenta, recién restaurada la democracia, por lo que se relaciona con el movimiento literario que trata de recuperar la realidad en el teatro, tras la experimentación de los años sesenta. En el caso de esta obra, procura el autor acercarse a la guerra civil con una mirada entre dramática y humorística. En el fragmento se aprecia la normalidad con que se adaptan los personajes a la nueva situación, al finalizar la guerra, junto con la denuncia: no ha llegado la paz, sino “la victoria.”
Desde un punto de vista pragmático, el texto es literario porque es ficcional, ya que el autor no está comprometido con la veracidad de lo narrado, a diferencia de lo que ocurre en otro tipo de textos (periodísticos, jurídicos, ensayísticos, etc.)
Desde una perspectiva formal, el carácter literario del texto se manifiesta en el empleo de un lenguaje especialmente cuidado y bello, que podemos considerar desautomatizado o extrañado. Por esta razón, diremos  que domina en el texto la función poética del lenguaje, por la cual el mensaje llama la atención sobre sí mismo.
A su vez, estos aspectos se concretan en el texto en el uso de algunos recursos expresivos, aunque son poco numerosos. Entre ellos, interesa especialmente la paradoja de la línea 6, por la cual se oponen la “paz” con la “victoria”, como términos antitéticos. Existen también interrogaciones retóricas (líneas 1, 3 y 7) y varias metáforas lexicalizadas (“depuren”, “apechugar”, “colocarte”, en las líneas 4 y 9), si bien ambos recursos pueden asociarse con el uso coloquial y dialogado del lenguaje que domina en el texto. La escasez de recursos nos permite asociar el texto a un tono conversacional y realista.
En cuanto a la forma de la enunciación, debemos hablar de un diálogo teatral. En primer lugar, porque existen dos interlocutores, si bien el texto, sumadas las intervenciones de ambos, posee coherencia y cohesión considerado en su conjunto, según corresponde a un diálogo. De hecho, ambos personajes aluden a un mismo tema (evocación de un pasado feliz frente a un futuro incierto) y se tratan con coherencia en cuanto a lo que cabe esperar de una conversación padre-hijo. En segundo lugar, como en todo diálogo, existe feed-back o intercambio constante de roles entre el emisor y el receptor, aunque parece obvio que es Don Luis quien sostiene el peso de la conversación y quien la orienta. Finalmente, el texto presenta la autosuficiencia propia del diálogo teatral, por la cual las voces de los personajes no están subordinadas a la de un narrador.
El texto posee además rasgos propios del lenguaje oral, entre los que cabe destacar el uso de fórmulas léxicas coloquiales, como “apechugar”, “mamá”, “Luisito”, “colocarte”, “hay que ver”, etc... También es propia del lenguaje oral la inconclusión de oraciones (“esperar a que me depuiren...”), la interrogación directa (“¿Te acuerdas ... bacalao?), y sobre todo los elementos propios de la función fática, con los que se busca confirmar que el canal de comunicación permanece abierto (“¿verdad?”, en dos ocasiones). Existen también elementos propios de la función conativa, como el vocativo “Luisito”, de la línea 6, y en general el hecho de que don Luis intente convencer al otro personaje de que acepte un empleo.
Finalmente, y como recursos propios del lenguaje teatral, es importante notar los apoyos extraverbales al desarrollo de la acción que se detecta en el texto, pues posiblemente ambos personajes están fumando (líneas iniciales). Por último, debe señalarse también la breve acotación inicial, que carece de valor literario y sirve sólo para indicar al lector las acciones del personaje.